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El 4 de noviembre de 2001 se realizaron en Nicaragua elecciones generales de presidente, diputados nacionales (20), diputados departamentales y regionales a la Asamblea Nacional (70), y diputados al Parlamento Centroamericano para un periodo de cinco años (20). Este artículo pretende analizar estos resultados, identificar algunas lecciones y prever los escenarios poselectorales posibles. Estos comicios suceden a un año de las primeras elecciones municipales realizadas de forma separada de las generales. Los principales contendientes fueron el trente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), partido de origen izauierdista, el Partido Liberal Constitucional (PLC), de derecha, y el Partido Conservador (PC), de derecha oligárquica más tradicional.
Palabras clave: elecciones, proceso político, sistenu político, Nicaragua.
Significado de las elecciones
Luego del reciente triunfo de Enrique Bolaños, el análisis indica que la puja política ha venido asumiendo la forma de una polarización electoral relativamente normal, a diferencia de elecciones anteriores donde aquélla presentaba raíces sociales y económicas que excedían el campo político-electoral. Esta es una tendencia positiva que coincide con el creciente aumento de la tolerancia, observada en estudios recientes1. En efecto, por vez primera en la historia cercana en estas elecciones no se discutieron ni se jugaron objetivos extraelectorales, como sí ocurrió en 1990 y 1996. Cabe recordar que con el derrocamiento insurreccional de la dictadura somocista en 1979, se instauraba en Nicaragua un nuevo régimen revolucionario sandinista que pretendía reorientar el país hacia un modelo definido por los mismos revolutionaries como de «aspiración socialista». La guerra contrarrevolucionaria organizada y dirigida por Estados Unidos, iniciada tempranamente y que se extendió durante la década de los 80, desangró y empobreció al país y tensionó extraordinariamente las posibilidades de transformación al tener que destinar los recursos a las labores de defensa. Las elecciones de 1990 se convirtieron así en una especie de referendo para determinar si se continuaba con la busqueda de un modelo alternativo de sociedad con todas sus dificultades, el acoso imperial y la guerra consecuente, o si el país retornaba a la paz, lo que significaba volver al redil de los países de regímenes típicamente capitalistas. El resultado fue la derrota de la opciín revolucionaria.
Las elecciones de 1996 también supusieron objetivos extraelectorales, al incluir el debate de la propiedad. Esto surge del trastocamiento provocado por las...