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CARLOS PARDO-FIGUEROA THAYS y JOSEPH DAGER ALVA (eds.), El virrey Amat y su tiempo. Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú / Instituto Riva-Agüero, 2004, 476 págs.
Manuel de Amat y Junyent fue gobernador colonial de Chile, entre 1755 y 1761, y, luego, virrey del Perú hasta 1776. Vale decir, en tanto agente político del imperio hispano, le tocó ejercer su labor en medio de todos los cambios y refuerzos desplegados por la Ilustración borbónica. En este sentido, sin duda, su tiempo fue apasionante, al igual que los procesos que experimentaron -o las razones por las que no Io hicieron- los diferentes actores de la sociedad peruana de esas décadas.
El libro que ahora comentamos pretende dar luces sobre Io anterior, siendo el resultado, a la vez colectivo e individual, del trabajo de un grupo de jóvenes investigadores de la Universidad Católica del Perú. Cada uno de ellos se encargó de explorar las diversas facetas publicas y privadas del virrey, en un recorrido que nos lleva desde su Cataluña natal, su carrera militar en España y su primer nombramiento gubernativo en América, como gobernador de Chile. La parte medular del libre contempla la revisión de su gobierno propiamente peruano, a partir de las diferentes áreas que marcaron la orientación borbónica de su administración. Así, la educación, la Iglesia, lo militar, el orden policial y la justicia. La obra termina con episodios más privados, ligados a sus negocios y a su amante.
Quisiéramos comenzar nuestro sobrevuelo en un piano más epistemológico, para luego adentrarnos a los contenidos específicos. Y nada mejor para ello que destacar la posición que presenta en su introducción uno de los editores de la obra, dando cuenta de la perspectiva positivista tradicional que dará el tono al libro. Allí, Joseph Dager nos muestra la revalorización del género biográfico en su perspectiva historiográfica más conservadora, aquella que trata "sobre el connotado personaje, el acreditado héroe, el digno estadista o el santo varón" (p. XI).
En efecto, como lo apunta el mismo editor -en una postura crítica, por cierto-, desde la década de 1970 la historiografía nos ha venido mostrando la importancia de diluir en su contexto a los personajes, hechos, batallas, ideas y leyes. Esta propuesta, que ya ha pasado a ser una línea...